El Aire es no-materia, son ideas, movimiento y posibilidades
Los signos de Aire
Cada elemento gobierna tres signos del zodiaco. Entender el funcionamiento de los elementos es el primer paso para empezar a estudiar Astrología con una base sólida.
Vamos a profundizar en el elemento Aire y veremos cómo hay ciertas características que comparten los tres signos de este elemento en sus tres modalidades o estados (cardinal, fija y mutable):
- Géminis - Aire - Mutable
- Libra - Aire - Cardinal
- Acuario - Aire - Fijo
Desentrañando las características del Aire
Los elementos desempeñan un papel esencial al definir nuestra personalidad y comportamiento a través de la Astrología. De los cuatro elementos, el Aire destaca por ser el más ligero y desapegado de la materia. Representa la visión con perspectiva (por encima de la materia, la emoción y el impulso), por lo que otorga un sentido objetivo de las cosas: son como se ven, son como otros las ven o como la mayoría las ve. Por este motivo el Aire busca el contraste y la conexión, así como el procesamiento mental de los resultados.
En el sistema astrológico, el signo cardinal de Aire marca el inicio del otoño (en el Hemisferio Norte). Momento del año de inicios sociales: comienza el curso académico y retomamos el contacto con compañeros de clase o de trabajo.
Las personas cuyo perfil predominante en su carta natal es el Aire suelen ser altamente cerebrales y poseen una notable capacidad para establecer relaciones que les brinden intercambio de ideas, movimiento y frescura mental. Les resulta difícil detenerse y mantenerse aferrados a situaciones e ideas rígidas. Destacan por sus habilidades sociales y dan prioridad al compartir, debatir y reconsiderar las cosas desde distintas perspectivas y alternativas. Los signos del elemento Aire (Géminis, Libra y Acuario) se caracterizan por su enfoque en el estímulo mental y las conexiones interpersonales, lo que les permite disfrutar fácilmente de conversaciones fascinantes y demostrar habilidad en algún ámbito teórico, social o comunicativo. Irradian diversión, ingenio y posibilidades. Adoran la compañía y la comunicación como vehículos para el cambio.
Mientras la Tierra es el límite físico necesario para que haya forma, estructura y materia, el Aire es aquello que empieza donde termina la Tierra. Es el espacio necesario entre la materia. Sirve como medio de comunicación entre la propia materia, porque transporta información como las abejas transportan el polen.
Las personas dominadas por el Aire en su carta natal tienden a ser flexibles, conversadoras, curiosas y orientadas hacia las relaciones y el mundo social. La potencia del Aire en la carta natal de una persona la vuelve ágil, cambiante, mental, racional, curiosa y comparativa.
Los tres signos zodiacales relacionados con el elemento Aire (Géminis, Libra y Acuario) comparten una inclinación hacia su proyección en otras personas y el mensaje que dan de sí mismas. Estas personas son apreciadas por su ingenio, su mente capaz de buscar alternativas y una falta evidente de conformismo que en exceso se vuelve rebeldía.
En el sistema elemental, el Aire aporta posibilidades y movimiento a los demás. Ayuda a salir de círculos viciosos a través del desapego, así como a progresar y tener en cuenta otras visiones mediante el análisis mental. Su influencia proporciona un toque que considera al prójimo pero que puede llegar a ser disruptivo si la visión del otro se vuelve obsoleta o limitante. En el Aire se gesta el rayo, que todo lo parte en un plisplás.
Identificando el Aire a nivel psicológico
Las personas de Aire o con este elemento predominante, independientemente de su carácter, transmiten un toque fresco y alejado de lo tradicional. Las de Aire son esas personas que se buscan para sacarnos de la monotonía o tener una buena charla.
- A menudo se les tilda de superficiales, porque les gusta saber, hablar y hacer un poco de todo. En el fondo, para que el Aire siga siendo tal, debe mantenerse en constante movimiento.
- Ante momentos complicados, tienen la capacidad de analizar fríamente la situación antes de dejarse llevar por el impulso o las emociones. Son de naturaleza objetiva.
- La conexión con su mente está muy desarrollada, y se manifiesta hacia el interés por cuestiones que la estimulan como el estudio, la lectura, los juegos mentales u otras actividades que le aportan puntos de vista diferentes.
- Son personas indecisas. Objetivizar todo y carecer de impulso, hace que entren en bucles infinitos y quieran considerar tantos puntos de vista que se pierdan en el intento. Por lo general, se acercan a personas de Fuego o de Tierra para que les ayuden a tomar decisiones.
- Cuando están en grupo suelen estar pendiente de la opinión de todas las personas y para hacerlo es frecuente verlos hacer multitud de preguntas, si tienen bastante Fuego, o escuchando, si tienen más Tierra o Agua. A nivel conversacional varían rápidamente de tema, esto es porque conectan ideas con otras de una forma veloz.
- Se les conoce por ser personas divertidas, siempre dispuestas a hacer planes diferentes. Se adhieren rápidamente a propuestas y proyectos de otras personas.
El Aire plasmado a nivel físico
Por lo general, el Aire se manifiesta en lo físico con varios de los siguientes comportamientos de forma simultanea:
- El físico suele transmitir ligereza, ya sea a través de un cuerpo delgado o pequeño, una cara fina o unos brazos alargados. Incluso si son personas corpulentas (si hay mucha Tierra), las extremidades suelen mantenerse finas y/o alargadas.
- La mirada transmite interés, jovialidad y gracia incluso en edades avanzadas.
- El Aire habla de lo alternativo, por lo que estas personas suelen alejarse de la belleza natural con excesivos complementos, peinados cambiantes u otras modificaciones corporales. Hay un claro intento de humanizar o intelectualizar la apariencia, diferenciándola lo máximo posible del reino animal.
- Suelen tener un estilo propio que independientemente del momento, siempre utilizan para comunicar algo de sí mismas. Es común que, en repetidas ocasiones durante su vida, sigan el estilo de tribus urbanas o encapsulen una ideología social o política en determinadas formas de vestir. No es que todas las personas de Aire vistan bien, pero si visten mal, entonces hay una intención.
- Bajo los límites de la genética sanguínea o étnica, el aire proporciona unos ojos más grandes de lo normal, comúnmente saltones como los de un búho, y si no es el caso, suele separarlos más de lo habitual entre sí o destacar sus pestañas prominentes. Es el acento físico en la mirada, la herramienta que tiene el Aire para enfatizar la búsqueda visual de estímulos e ideas.
- Especialmente si el signo Ascendente es de Aire, el cabello suele ser fuerte y abundante incluso en la vejez. Es curioso como este punto vincula el pelo con el simbolismo de las plumas en las aves y su importancia para pertenecer al reino del Aire.
Lo ideal es hacerse un estudio de carta natal, aunque en el anterior artículo te explicamos cómo saber tu elemento predominante a través de la carta natal.
A continuación, te explicamos cómo se combina este elemento con los demás.
El Aire combinado con otros elementos
Si tu elemento predominante es el Aire pero cuentas con otro elemento de igual o similar ponderación, las cualidades de este elemento se malean sutilmente dando otras posibilidades.
Combinación de Aire con Fuego
Estos elementos se estimulan mutuamente y son buenos para motivar(-se) en temas intelectuales o a través de la comunicación. Su fuerza está en la forma de expresar ideas, así como en los contactos y discípulos. Son buenos maestros, coaches, oradores, vendedores de viajes, clases o experiencias. Siempre están dispuestos a vivir nuevas aventuras que cambien sus esquemas mentales o los de otras personas.
Un ejemplo de esta combinación la vemos en la carta natal de Donald Trump, expresidente de los EEUU conocido mundialmente por su verborrea explosiva y fuerza mediática.
El principal defecto es que son demasiado directos con sus palabras, a menudo hirientes y poco empíricos. Hay una tendencia innata a hablar más de la cuenta e imponer sus ideas. En lo persona, tienen una actitud despilfarradora y les cuesta valorar el mundo material o sus propios recursos, lo que en el caso de Trump no ha sido del todo un defecto.
Combinación de Aire con la Tierra
Cuando el Aire y la Tierra se combinan es inevitable pensar en la parte más racional de la vida. El análisis y control de la Tierra pasan por el filtro mental del Aire derivando en infinidad de posibilidades. Llegado el punto de que no funcione la estructura conocida, no tienen miedo de abrirse a nuevos métodos. Son personas cautas pero menos rígidas que cuando impera exclusivamente la Tierra. Esta combinación es el arquetípico de la Ciencia, regida por unas leyes y limitaciones universales pero abierta al progreso y a la constante experimentación que la cuestione según los ritmos sociales. Cabe esperar que estas personas tengan un comportamiento científico frente a la vida y estén contrastando continuamente lo establecido con lo nuevo, con el afán de materializar alternativas sociales. También pueden ser buenos reivindicando a través de lo matérico o volviendo científico algo que aparentemente es un arte.
Un ejemplo es Alberto Durero, pintor Alemán del S. XV. La pintura es un arte matérico (de Tierra), pero Durero se centró en incorporar en el arte conservador alemán las ideas de los humanistas italianos (Aire) y legó varios libros sobre medidas y proporciones en los que dejaba clara su postura sobre la importancia de lo racional y numérico en el arte.
El principal defecto de esta combinación es darle la espalda a las emociones. A menudo, tratar de bloquear lo sensible mediante la razón puede generar problemas psicosomáticos. Muchas veces, cuando saben que algo va mal por dentro es cuando ya lo están viendo por fuera.
Combinación de Aire con Agua
El Aire y el Agua son muy diferentes, pero su principal similitud es que fluyen y se adaptan al entorno, aunque uno lo haga activamente y el otro de forma pasiva. Estas personas son buenas llegando a un equilibrio entre pensamiento y emociones, a menudo se escuchan y tratan de comprender sus emociones, y también expresan lo que sienten para procesarlo a través del tamiz del hemisferio izquierdo. Tienden a querer buscar una explicación en lo subconsciente o aparentemente mágico a través de la experimentación o el estudio. Muchas de estas personas se vuelven perseguidoras de teorías utópicas que demuestren lo imposible. También es común que escriban o hablen sobre temas sensibles o se adhieren a grupos ideológicos y colectivos científicos. Hay una extraña necesidad de afiliarse para ganar fuerza.
Un claro ejemplo de esta combinación se puede ver en la carta astral de Tom Cruise, actor estadounidense que ha sabido vehicular muy bien estas energías mediante la interpretación, que no es más que sentir emociones (Agua) que no existían de forma natural y poder transmitirlas (Aire) con lo que se dice y se ve de uno mismo. No contenta con esto, la energía hizo que Cruise se uniera a una polémica secta conocida como Cienciología. Esta doctrina afirma que la vida ideal implica educación, conocimiento y mejora continua (Aire), tanto espiritual como ética (Agua), para alcanzar la felicidad y la salvación definitiva.
Es de esperar que las personas de Aire y Agua se adapten en exceso al entorno y no sean constantes en la materialización de sus objetivos, puesto que a menudo ceden el poder de decisión a sus relaciones.
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